traducció - translate - traducción

31.8.15

#cotarelo: El cartero del Rey.


Font: http://cotarelo.blogspot.com.es/2015/08/el-cartero-del-rey.html

Ayer fue la Guardia Civil; hoy, una reprimenda epistolar de Felipe González. El nacionalismo español está en pie de guerra. Y en El País, que le cede su articulo editorial, es decir,  hace suya la opinión de González, y este habla por el periódico. No es menudo privilegio. Se entiende, sin embargo. Hace ya unas fechas que, habiendo comprendido por fin el calado de lo que llama con flema anglosajona el desafío soberanista, el cuarto de máquinas del diario de Prisa echa humo. Ha puesto a trabajar a  sus plumillas más o menos cultos y los muñidores de ideología en defensa de la unidad de la Patria. Si su autoconciencia legitimadora lo pinta como el diario de la transición y el que se enfrentó al golpe de 1981 en nombre de la Constitución, su idea del momento es erigirse en paladín de la unidad de España y nuevo salvador de la Patria.

El editorial firmado por González viene a ser como un artículo de fondo. Aunque de poco fondo. Como pieza literaria es insignificante y como documento resulta bastante ramplón. Ocasión tan distinguida hubiera necesitado algo más de estilo y mayor densidad de contenido. No tendría por qué ser un nuevo Discurso a la nación española o Yo acuso u Oigo Patria tu aflicción, pero debiera tener algo que permitiera recordarlo. En vez de eso, la epístola que González dirige a los catalanes, a diferencia de las que San Pedro o San Pablo dirigían a distintos destinatarios colectivos, reproduce el contenido adocenado de las habituales admoniciones del nacionalismo español de más rancia estirpe vestido con las galas del "éxito" de la segunda restauración. Tengo la impresión de que el Rey le ha pedido que se dirija a los españoles en defensa del statu quo -y la Corona, por ende- y le ha dado la plantilla del discurso español tradicionalista, una triada que incluye: a) jeremiadas, b) malos augurios; c) amenazas.

Las jeremiadas. ¡Ah, con lo bien que nos llevamos y lo mucho que hemos prosperado gracias a la Constitución de 1978 que otorga el mayor autogobierno que Cataluña ha tenido en su historia! González no está familiarizado con la del nacionalismo catalán e ignora que lo lógico (y legítimo) de este no es quedarse con "el mayo autogobierno"  sino la totalidad del autogobierno. Esto sin contar con que el juicio sobre el Título VIII de la CE es muy contradictorio. A él le parece un éxito; a otros, un desastre y un fracaso, sobre todo después de que Alfonso Guerra y los demás "Guerras" que hay en el Parlamento y el Tribunal Constitucional se cepillaron el Estatuto de 2006.

¡Ah, qué lástima ver Cataluña convertida en una Albania! Tengo la impresión de que antes se verá así España que Cataluña. Pero, sobre todo, es absurdo emplear estas imágenes después de los referéndums de Quebec y Escocia, que han dejado sin argumentos a los nacionalistas españoles. En especial los de Quebec porque se dieron a raíz de una doctrina jurisprudencial del Tribunal Supremo Federal, según la cual, el derecho de autodeterminación no existe en la Constitución canadiense (como tampoco en la CE), pero si una parte importante de la población se empeña en ejercerlo, el Estado viene obligado a negociar alguna forma para ello, como es lógico y entiende todo el mundo, incluida Escocia, pero no el gobierno español.

Las "razones", los (malos) augurios. Horrorosa la pretensión de desconexión de Mas tan en contra del espíritu del tiempo, que es el de la gran conectividad.  Dice González que la desconexión será en primer lugar entre catalanes, pues ya empieza a haber signos de racismo. Cierto. Pero los ha habido siempre. Y en todas direcciones. El "¡háblame en cristiano!" es puro racismo. Tambien dice que se quiere desconectar a los catalanes del resto de los españoles. Si todo el mundo está tan conectado, tanto dará estarlo con los españoles como con los demás europeos. Y esto sin contar con que ese  contacto entre españoles y catalanes de que tanto dicen enorgullecerse los políticos nacionalistas españoles es pura demagogia. Un estudio sobre los prejuicios de unos hacia otros, del grado de conocimiemto real sobre todo de los españoles hacia los catalanes probará que no hay cercanía y que no la habido nunca. Para los españoles, en el fondo, Cataluña no es el extranjero, pero sí el cuasiextranjero.

Igualmente se augura una ruptura de Cataluña con Europa. Ni que él fuera el dueño de lakermesse. Eso está por ver y también lo está lo que pueda hacer España o lo que quede de ella. No resulta verosímil que la parte más europea de España vaya a quedar fuera de Europa. No es pensable ni quizá posible. González recurre a una caricatura: un consejo europeo de 200 o 300 miembros. Eso no se dará, pero, aunque se diera, ¿qué? ¿Cuál es problema con que en lugar de haber 28 Estados en Europa haya 29 o 39 o 45 o 7? ¿La defensa? Nadie ignora que Europa es incapaz de defenderse a sí misma aquí y ahora y depende para ello de la OTAN y, en último término, a qué engañarse, de los Estados Unidos. Las cosas no cambiarán mucho. 

Augura González asimismo una ruptura con América Latina y señala los 500 millones de almas de un apetitoso mercado con el que nos une la lengua. Y ¿quién ha dicho al expresidente que dejará de hacerlo? El español o castellano seguirá siendo oficial en Cataluña independiente por la cuenta que le trae. A esta desconexión le pasará lo que al intento de mantener a los catalanes y aragoneses en general al margen del comercio con el imperio español. Sin duda se dio en uno u otro momento, pero siempre hubo comerciantes de la Corona de Aragón en la trata de Indias.

Amenazas. Aunque el escriba las edulcora cuanto puede, están siempre ahí: ningún gobierno español negociará, dice, ante hechos consumados Eso de los "hechos consumados" suena a nazi y, en efecto, no falta la comparación (disimulada, pero clara) entre Cataluña y Alemania/Italia años treinta. Luego de una serie de intentos de los catalanes de negociar, siempre rechazados (el propio González acusa al gobierno de no negociar y de inmovilista), ¿qué significa aquí "hechos consumados"? Y eso sin contar con que se trata de otro vaticinio: ningún gobierno español se sentará a negociar ante hechos consumados, hasta que se siente.

Pero González aquí tiene otro talante. Sale el demócrata, el gran defensor del Estado de derecho y recuerda que el límite a la ambición de Mas (nunca habla de movimiento social o cosa parecida; la posible secesión de Cataluña es una manía de Mas) es la ley. Tan solemne se pone que la escribe con mayúsculas: la LEY. Hay que cumplir la ley. Exactamente lo mismo que dice Rajoy.  Y con más rotundidad que los infelices compañeros de partido de González pues, cuando le parece, él la incumple. A veces se molesta en disfrazar el incumplimiento de reforma según el procedimiento previsto pues para eso tiene una mayoría absoluta parlamentaria ante quien nadie rechista. Otras veces se limita a incumplir (generalmente plazos, obligaciones, etc) y no sucede nada. Los catalanes, en cambio tienen que cumplirla a rajatabla, por inicua o injusta que sea. Y eso no está bien, lo vea él así o no.

Dice González que no le gusta lo que hace el gobierno, pero que no puede ser equidistante. O sea, que se alinea con quien hace lo que no le gusta, probablemente porque el otro se apresta a hacer algo que le gusta menos. Parecería suficiente, pero no es así. La ultima ratio no podía faltar. Y no falta: Ningún gobierno responsable puede permitir una política de hechos consumados, y menos rompiendo la legalidad, porque invitaría a otros a aventuras en sentido contrario.

En todo caso, concluye González, no haya cuidado porque España no va a romperse por la muy poderosa razón de que "sé que eso no va a ocurrir, sea cual sea el resultado electoral".

Pues podía habernos ahorrado la carta.

(La imagen de Felipe González es una foto de Wikipedia, con
licencia Creative Commons).


Share/Bookmark

30.8.15

La República catalana i la construcció del Països Catalans

Font: La República catalana i la construcció del Països Catalans | País Valencià, Segle XXI


catippcc

Pau Viciano
La transformació de la Catalunya autònoma en un estat independent per força modificarà les perspectives de la construcció dels Països Catalans. De fet, el mateix procés sobiranista del Principat ja ha estimulat el debat teòric i els posicionaments de les forces polítiques de la resta de territoris catalans. De vegades sense fer massa soroll mediàtic, per la prudència que imposa les reaccions anticatalanistes i l’heterogeneïtat de les formacions cridades a fer fora la dreta espanyola de les respectius governs autonòmics. Però les esperances i els temors que suscita el procés estan aquí. Els més optimistes hi veuen el paper positiu d’un estat català independent a l’hora de defensar la llengua i la cultura comunes i, sobretot, el factor de demostració que seria tenir a la vora un país lliure, pròsper i ben governat. Els pessimistes temen que la reacció espanyolista podria endur-se per davant els assoliments de la resistència cultural al País Valencià i a les Illes Balears, i ofegar definitivament les forces que, de manera incipient, hi qüestionen el sucursalisme polític encara dominant. De fet, el desnivell entre la consciència nacional del Principat i de la resta dels territoris ja hauria fet inviable el projecte dels Països Catalans. Però encara n’hi ha de més pessimistes: els qui temen que la República catalana, en un exercici derealpolitik, per a guanyar-se el reconeixement d’Espanya i de la comunitat internacional, podria renunciar a qualsevol iniciativa que pogués ser titllada d’irredemptisme, i abandonaria així els valencians i balears a la seua sort, és a dir, a l’espanyolització definitiva. Ara bé, siga com siga, i segurament la realitat es trobarà en algun punt intermedi entre aquests extrems, el cert és que l’existència d’una República catalana independent modificarà les estratègies per fer del conjunt dels Països Catalans una veritable comunitat política.
Fins ara, el guió subjacent entre les principals forces nacionals de cada territori era que cadascú aniria fent país, dins del seu marc autonòmic, fins que els territoris diguem-ne perifèrics s’acostarien als nivells de conscienciació del Principat, per poder bastir aleshores solidaritats que ens permetrien fer el salt a la sobirania tots plegats. Però si Catalunya esdevé un estat independent aquesta estratègia queda obsoleta, si més no en els seus plantejaments tàctics. Així, seria possible encetar una altra via: que els valencians i balears conscients de la seua catalanitat adquirissen la ciutadania de la República catalana i que es reivindicassen com a minoria nacional dins d’Espanya, amb drets lingüístics i culturals protegits per la Catalunya independent. Els valencians i els balears de passaport català es reduirien així a una minoria nacional d’un estat veí, enmig d’una població majoritàriament espanyola. Aquest no sembla un camí amb massa perspectives. Això no vol dir que la futura República catalana no puga concedir la ciutadania del nou estat als habitants de la resta dels Països Catalans que han treballat per la mateixa idea nacional. Però el projecte no pot ser d’adscripcions individuals sinó territorials. Les forces valencianes i balears hauran de construir els seus respectius països com a subjectes polítics, hauran de cohesionar les seues societats al voltant d’un sobiranisme entès també com una oportunitat de progrés social. Però això no significa seguir mimèticament el procés del Principat: allí l’autonomisme és una fase superada, perquè una àmplia majoria social s’ha fet conscient dels seus límits. En canvi, al País Valencià i a les Balears la política immediata no pot apel·lar al sobiranisme, perquè les respectives autonomies encara no són vies esgotades, encara queda per recórrer tot el camí que la Catalunya autònoma va fer en el seu moment. Perquè, amb totes les limitacions, també va acomplir objectius necessaris, com –per exemple– la immersió lingüística, la creació d’un espai de comunicació propi i ampliar el sentit de pertinença d’àmplies capes immigrades. I tot això, al País Valencià i a les Balears encara està per fer. Les institucions autonòmiques han estat segrestades i desvirtuades per una dreta espanyolista, anticatalanista i depredadora, i encara no han pogut ser posades al servei de la ciutadania i de la recuperació de la dignitat col·lectiva. A curt termini, el repte que tenen plantejats aquests territoris –més complex és encara el cas de la Franja de Ponent i el de la Catalunya Nord— és bastir un consens social entre les forces progressistes –federalistes i sobiranistes— per dotar de veritable contingut l’autogovern autonòmic i, vingut el cas, d’ampliar-lo. El més segur és que, a la llarga, la intransigència constitutiva d’Espanya acabarà per fer evident a la ciutadania els límits del model autonòmic. Aleshores ja estarem en una nova fase, en què la reivindicació sobiranista pot esdevenir una força determinant. No cal dir que, en aquest procés, la desactivació de l’anticatalanisme i la creació de complicitats amb la República catalana contribuiran al fet que, en un futur més o menys llunyà, un País Valencià i unes Illes Balears sobiranes trien majoritàriament l’articulació política –federal, confederal o amb d’altres fórmules– amb la Catalunya independent. Aleshores la idea dels Països Catalans haurà de deixat de ser “una pura il·lusió de l’esperit” per esdevenir un projecte polític –i cultural, evidentment— tangible. Però ara convé tocar de peus a terra: la dialèctica de la història pot prendre girs inesperats, però difícilment ofereix dreceres que permeten cremar etapes.
(Publicat a la revista Eines per a l’Esquerra Nacional, primavera del 2015)

Share/Bookmark

29.8.15

PAÏSOS CATALANS: La cosa que atemoreix l’estat espanyol i que nosaltres hem de superar



La caverna s’ha posat molt nerviosa. El conseller Gordó els ha trepitjat l’ull de poll. La independència de Catalunya és l’amenaça més important que sent l’estat espanyol en aquest moment, però si alguna cosa els atemoreix més és que el País Valencià i les Illes Balears segueixin el mateix camí a mitjà termini. A tots ens sembla que ara per ara això queda molt lluny. Però jo també veia lluny la possibilitat de la independència del Principat de Catalunya fa tan sols deu anys. És evident l’efecte que pot tenir una república independent de Catalunya a la resta de la nació catalana.
Per desgràcia, les declaracions sensates i de pura lògica del conseller Gordó han trepitjat l’ull de poll espanyol però també el catalunyista. I entre els qui són independentistes del Principat de Catalunya també hem sentit la música pujolista de l’ara no toca. He defensat i defensaré sempre que en tingui l’oportunitat que Catalunya ha de ser un país en debat permanent. I un país madur no ha de sentir incomoditat per cap debat. Ni el de la llengua, ni el de l’exèrcit, ni el dels Països Catalans, ni el de l’energia, ni el dels horaris, ni el del model d’ensenyament, ni el del sistema econòmic… El meu lema és ‘Catalunya, un estat en debat permanent’.
A banda dels ‘ara no toca’, l’independentisme catalunyista també és plagat de blavers. Hi ha independentistes hostils a la resta de terres amb qui compartim història, cultura, unitat econòmica, interès geostratègic i llengua, entre més. Per alguna raó que no sé, hi ha un munt d’independentistes de nova fornada que no volen saber res del país complet i lluiten contra qualsevol proposta d’unitat, aliança o afinitat que es faci. I és que l’independentisme ha crescut sobtadament i no ha paït amb naturalitat alguns dels coneixements i dels valors de l’independentisme històric. Potser era un preu que calia pagar? No ho crec. Però caldrà esmerçar el temps, les idees i els recursos que calguin per a corregir aquesta tendència fratricida.
Hi ha una fórmula màgica per a fer passar el blaverisme de cop: viatjar pel país i conèixer-ne la gent i les entitats i associacions que malden per refer la cultura, la llengua i la consciència al País Valencià, a les Illes Balears, a Catalunya Nord o a la Franja de Ponent. Fer amics de tot arreu és el remei més bo per a sortir d’aquesta trampa que ens han posat l’estat espanyol i l’estat francès des de fa segles.
Hi ha més maneres d’alliberar-se de la mentalitat autonomista fragmentadora que molts independentistes del Principat de Catalunya han assumit sense adonar-se’n. Per exemple, llegir la història completa de la Guerra de Successió i parar-se als fets de 1707 o comprovar que la caiguda de Barcelona i de Cardona no van ser la fi de la guerra, que va durar fins el 1715 a Mallorca i Eivissa. I de tot aquell episodi, podem fixar-nos en la col·laboració imprescindible de mallorquins i valencians en la defensa de Barcelona —un fet massa poc recordat al Tricentenari a Catalunya. O també podem mirar què va passar el 1659 amb el Tractat dels Pirineus. I si algú pensa que tot això és massa lluny, podem anar repassant la història de tota la nació sencera i comprovar que el paral·lelisme és molt gran.
Un primer pas en aquesta direcció de descoberta de la nostra història es pot fer avui assistint als actes del Tricentenari 1715-2015 que es fan a Barcelona. Un dinar de germanor al Museu d’Història de Catalunya, una ofrena al Fossar de les Moreres (17.30) i una visita guiada a l’exposició ‘1715. La fi del regne enmig del mar’ al Born Centre Cultural (18.00) poden ser una gran experiència d’autocentrament. Si no hi podeu assistir, llegiu aquest apunt interessant al bloc de Bartomeu Mestre.
Que els estats espanyol i francès ens vulguin esquarterats i dividits, ho entenc perfectament. La màxima ‘divideix i venceràs’ és de les més rotundament encertades que existeixen. Hi ha moltes maneres d’ofegar una nació que vols sotmetre. I la primera manera és trossejant-la i restant-hi força. Jo no sóc ni més diferent ni més semblant a un català d’Algaida, de Xàtiva o de Baó que a un català de Tortosa. Que me’n vulgui separar aquell qui vol que el meu poble deixi d’existir, és lògic. Que ho vulgui fer qui vol construir un futur lliure i digne és una contradicció i un tret al peu.
Com deia al principi, podem debatre-ho tot i podem tenir estratègies d’àmbit nacional molt diverses. Però ni ens podem inventar la nostra història ni podem anar en contra de l’interès propi. Tenim posades moltes esperances a la independència del Principat de Catalunya. Caldrà refer moltes coses i millorar-ne moltes més. I espero que sapiguem reconduir aquesta mirada egoista del catalunyisme. Entre més motius, perquè la descoberta de la nació sencera serà una experiència molt gratificant per a tothom. I la revolta dels somriures es convertirà en una festa de germanor.

Share/Bookmark

28.8.15

PROVES DE LA INVENCIÓ DE LES ENQUESTES DE LA RAZÓN

ANEU-VOS REFIANT DELS SONDEJOS DE L'ENEMIC!



Deuen ser el Marhuenda i el fantasma de Lara els que cuinen les enquestes 

L'empresa que consta als sondeig de La Razón és NC REPORT



Com que el nom sembla important cercaré a Google ... 



Només em surten enquestes i sondeigs per a La Razón. Que estrany! Ah, però té un web! (visiteu la pàgina).


Per cert, on no hi figuren clients.  Que estrany! Seguirem a Google...


Algunes informacions sobre l'empresa:



De debò que si necessitéssiu un sondeig, veient el web i llegint la seva credibilitat, contractarieu NC REPORT? Llavors ... com és que tot un diari d'àmbit "nacional" com La Razón, propietat de l'editorial en castellà més important del món, és a dir, una gent teòricament "seriosa i rigorosa ", contracten els serveis d'una empresa tant "cutre"?



Si desitjes contractar els seus serveis, no trobaràs l'empresa enlloc, tampoc.


Té la seva seu en un població de 20.000 habitants (Av. Joan Fuster, 16, 46400 Cullera, País Valencià) 


A veure a Google Maps?

Vaja! està enmig del no-res!!!

Comprovem si hi ha algun error. Busquem pels números dels edificis

A veure el número de l'últim bloc?
Vaja, és el 8 !!!!!
No intenteu buscar més enllà de la rotonda doncs canvia de nom
Busqueu vosaltres mateixos/es És divertit constatar que en un gir de 360º només s'hi veuen matolls ... 

Bé, insistirem amb l'adreça a Google. Ups, sorpresa! Mireu què hi apareix: 
Perquè NC Report comparteix la mateixa direcció - que no existeix - amb una empresa de mercaderies?

És possible que la resposta sigui que NC REPORT  s'hagi independitzat i ja estigui en una altra dimensió: La dimensió desconeguda!!!


Share/Bookmark

27.8.15

PAÏSOS CATALANS: Manifest de l’esquerra independentista per l’Onze de Setembre de 2015 | Endavant (OSAN)




Manifest unitari de l’esquerra independentista
Països Catalans, camí a la llibertat. Tirem pel dret!
En aquests temps en què la voluntat de canvis topa amb el mur del règim i el sistema, els Països Catalans afrontem algunes cruïlles decisives en el camí cap a la construcció d’una república independent, socialista i feminista. Uns ens prometen un viatge ràpid i legalista cap a la independència… sempre i quan la legalitat ho permeti, no toquem cap dels seus privilegis i tanquem els ulls davant la situació d’empobriment generalitzat de les classes populars. Uns altres ens prometen tot de canvis… sense tocar però cap dels pilars fonamentals del règim: monarquia, unitat d’Espanya i Unió Europea.
A Catalunya, Convergència ha imposat el seu lideratge a una part de l’independentisme a canvi de la promesa de pilotar una part dels Països Catalans cap a la independència. Però, com ja van demostrar amb el 9N, no estan disposats a desobeir l’ordenament constitucional. I cal dir-ho i repetir-ho: tot full de ruta cap a la independència és paper mullat sense la desobediència. I tot el seu nou programa polític “amb sensibilitat social” contrasta amb les seves polítiques d’aplicació de retallades, compliment dels dictats econòmics de la troica i el seu suport al TTIP. Unes polítiques que han generat una situació de precarietat a la majoria de classes populars no poden ser unes polítiques capaces d’aglutinar la majoria social que ens cal per a defensar la independència.
D’altra banda, els intents d’aliança entre Podemos i sectors de l’esquerra autonomista (ICV, Compromís) ha vingut a perpetrar una operació ja coneguda per tots i totes. La promesa de canvis socials que no toquin els “temes intocables” del sistema. Podemos no es planteja qüestionar la monarquia, no refusa el pagament del deute, no reconeix el dret d’autodeterminació com a principi democràtic previ a qualsevol legalitat, no qüestiona la permanència dins la Unió Europea. Quins canvis es poden fer sense qüestionar tot això? Cap. És la reedició del vell nacionalisme progressista espanyol assajat ja abans per Felipe González i Alfonso Guerra. Amb un matís rellevant: el seu actual programa polític és molt més moderat que el del PSOE de 1979.
Davant d’això, la Unitat Popular ha de continuar teixint el seu programa i la seva organització. I dir ben alt i clar que la independència és possible i que canviar-ho tot també. I que per fer-ho possible , per a fer avançar la ruptura, és important tenir clar què possibilita el canvi i què és maquillatge i la propaganda. Nosaltres arreu dels Països Catalans ho tenim clar:
  • Amb l’autonomisme no hi ha futur, és una via morta.
  • Sense desobediència no podrem exercir la nostra autodeterminació.
  • Sense independència no hi podrà haver transformació social.
  • Sense socialisme no serà possible la plena sobirania.
  • Sense feminisme no serà possible eliminar les desigualtats.
  • La nostra llibertat nacional no serà completa sense la construcció dels Països Catalans.
Relliguem tot això i continuem construint, al carrer, a la feina i a les institucions l’alternativa que aglutini una majoria social de les classes populars dels Països Catalans.
Cap a la independència, el socialisme i el feminisme!
Països Catalans, 11 de setembre de 2015

Share/Bookmark

26.8.15

Països Catalans: Voldrà ser Catalunya el meu ‘kin-state’?


  • Editorial
  • Vicent Partal




Les declaracions recents del conseller Gordó sobre la necessitat de no oblidar la resta del país quan es produïsca la independència del Principat han alçat una polseguera notable. Interessada, com tot allò que té a veure amb aquesta campanya. Cal agrair, però, que algú pose sobre la taula un tema dels dos que semblen tenir adjudicat el paper de ser el preu que Catalunya està disposada a pagar per ser independent —l’altre serà la llengua.
Cal agrair-ho, doncs, i cal emmarcar el debat. Emmarcar-los des d’una banda i des de l’altra de la frontera que sembla que apareixerà aviat i que alguns, com hem fet des que tenim consciència, ignorarem. Avui en parla ací mateix a VilaWeb l’eurodiputat de Compromís, Jordi Sebastià. Per nosaltres els valencians, mallorquins, eivissencs, rossellonesos o fragatins, per dir-ne uns quants, el debat és clau. Pels andorrans i els algueresos, també, encara que amb una altra intensitat. Però ho és per la gent del Principat. I la pregunta és: en això el Principat vol ser un estat europeu normal?
Perquè si ho vol ser s’haurà de comportar com a tal i això implica d’acceptar, com fan tots els estats d’Europa, que les fronteres de la nació no coincideixen amb les de l’estat. I mirar de compatibilitzar nacionalitat i ciutadania. Tret d’Islàndia cap estat europeu no té dins les fronteres només nacionals de la pròpia nació o no té nacionals fora de les fronteres. Per això les darreres dècades ha anat obrint pas un debat ben important sobre com cal establir un marc polític coherent que permeta de respectar les fronteres estatals al temps que es respecta que tots els nacionals d’una nació puguen mantenir uns lligams i uns drets, per damunt de les fronteres.
I és d’ací que neix el concepte de ‘kin-state’, impulsat sobretot per l’OSCE i el Consell d’Europa. Un ‘kin-state’ és un estat que sap que té responsabilitats sobre nacionals seus que han restat a l’altra banda de la frontera del seu estat, momentàniament o de forma permanent. I que, sabent això, no defuig les responsabilitats culturals o polítiques. Allò que va dir el conseller Gordó, doncs, no solament no tenia res d’estrany, sinó que era la norma habitual, cada vegada més codificada, a més, a la majoria dels estats europeus. Inclosa Espanya, per cert, que malgrat ser especialment reticent a parlar d’aquests temes ha decidit comportar-se com un ‘kin-state’ amb els jueus sefardites: els ha atorgat drets especials considerant-los espanyols, uns espanyols diferents dels espanyols, però espanyols encara després dels segles.
Hi ha països, Alemanya, Dinamarca, Croàcia…, que incorporen normes legals, a la constitució i tot, de suport als nacionals que han restat fora de les fronteres de l’estat. En alguns casos, Hongria, Grècia, Polònia…, fins i tot s’editen documents d’identitat ‘de nacionalitat’ o es permet la doble nacionalitat de forma automàtica. I hi ha situacions, Irlanda respecte d’Irlanda del Nord, Àustria respecte del Tirol del Sud, Suècia respecte de les Illes Aland, en què legalment els estats, Gran Bretanya, Itàlia o Finlàndia, permeten que els ‘kin-states’ tinguen responsabilitats legals i drets polítics als territoris on habiten nacionals seus.
La pregunta és què farà la república catalana?
Per descomptat, però, que aquest és un problema que reclama d’aclarir un concepte previ, sempre incòmode al Principat. Això no és un debat de territoris. Ací no es tracta de ‘incloure’ o no el País Valencià o Catalunya Nord a la ‘nació catalana’ —com demagògicament ho han volgut presentar alguns. Ací el debat és de persones i és concret: jo sóc de Bétera i per això mateix em sent català. Espanya aquest dret sempre me l’ha negat, però me’l negarà ara la república catalana? Em dirà que no meresc ser allò que sóc? Òbviament no és un problema personal: com jo hi ha milers, desenes de milers, centenars de milers de persones, no ho sé, que sense ser del Principat ens sentim catalans. Nosaltres hem decidit de ser tal com som i molts hem treballat molt per al nostre país, sense mirar ni respectar mai cap frontera, de forma integral.

Share/Bookmark

24.8.15

Ras i curt del perquè hem d'anar a votar el 27S

Un vídeo molt interessant, clar i curt del perquè cal votar el 27S als…

Share/Bookmark

1.8.15

FINS SETEMBRE, EL DIA QUE DURARÀ ANYS !!!



Tancarem la paradeta durant l'agost per agafar embranzida per al que vindrà a partir de setembre.

Molta sort a tothom i bon estiu; espero que posem el nostre coneixement, la nostra lucidesa i la nostra energia en assolir el millor per al nostre poble.

Després de 300, 500 o 700 anys - depèn des de quan es calculi la presa de pèl -, potser amb un dia no en tindrem prou i necessitarem tot un més de reflexió.

Bon agost, doncs, us deixo un vídeo fet amb voluntat de reforçar l'autoestima.

Des dels 70's que estàvem esperant un moment com l'actual. La veritat, jo no ho veia massa possible i per tant agraeixo a tothom el fet d'haver lluitat per fer-ho possible.

EL DIA QUE DURARÀ ANYS
Dedicat a les persones que s'han anat quedant pel camí.

Share/Bookmark